En verano, cuando la mayoría de la gente se va de vacaciones, se produce un aumento de robos en las viviendas. En internet es fácil encontrar consejos para proteger nuestra vivienda de robos e intrusiones, pero si, en el peor de los casos, al volver de vacaciones, descubrimos que hemos sufrido un robo en nuestro domicilio… ¿Cómo debemos actuar?

¿Qué hacer si al volver a nuestro domicilio sospechamos que se ha producido un robo?

Llegar a casa y descubrir que se ha producido un robo en nuestro domicilio es uno de nuestros principales temores, sobre todo en estas fechas. Si nos encontramos en esta situación lo mejor es tratar de mantener la calma y seguir estos pasos, para garantizar nuestra seguridad y facilitar su labor a la policía:

No entrar en la vivienda y no tocar nada

Si al llegar a casa descubrimos señales de que alguien ha entrado, como la puerta forzada o la ventana rota, nuestro primer impulso será entrar y comprobar nuestros efectos personales para saber qué nos han robado o intentar arreglar el desastre que han provocado desvalijando la vivienda, pero no debemos hacerlo, ya que contaminaríamos pruebas que pueden ser vitales para la policía.

Además, si descubrimos que hemos sufrido un robo en el domicilio, lo mejor será esperar a la policía fuera de casa, ya que quizás los ladrones sigan dentro y nos podamos ver envueltos en situaciones peligrosas.

Llamar a la policía

Cuando estemos en un lugar seguro llamaremos a la policía. Podemos llamar a la Policía Nacional al 091 o a la Guardia Civil al 062 si vivimos en una zona rural que no disponga de Policía nacional, si llamamos a emergencias en el 112 nos remitirán a Policía Nacional o Guardia Civil según corresponda

Comprobar qué nos han robado

Solo cuando la policía haya terminado su investigación podremos inspeccionar nuestra vivienda y ver lo que han robado. Haremos un inventario para poner la denuncia y reclamar los daños al seguro.

Si conservamos la factura, el ticket, la caja u otra información como el numero de serie, modelo o año de fabricación de los objetos robados, o fotografías de estos, recopilarla en la denuncia será útil para que, si la policía encuentra a los ladrones, identifique nuestras pertenencias y pueda devolverlas, o en su defecto ayudará a nuestro seguro a calcular la indemnización que corresponde.

Poner una denuncia en comisaría

Es importante realizar la denuncia cuanto antes, recuerda que podremos añadir más información que recordemos o documentos sobre los objetos robados más adelante.

También es importante solicitar un resguardo de la denuncia, ya que será necesario para los trámites posteriores.

Si existen cámaras de videovigilancia en la Comunidad de Propietarios, es importante proporcionar las imágenes a la policía para determinar el momento del robo, para ayudar a identificar a los ladrones.

¿Qué hacer si sufrimos un robo mientras estamos en nuestro domicilio?

Sufrir un robo en nuestro domicilio estando dentro es una situación inusual, ya que los ladrones suelen buscar casas que saben que están vacías. Sin embargo, es lógico que nos preocupe, ya que esta situación, además de ser traumática, puede ser muy peligrosa para nuestra integridad y la de los miembros de nuestra familia.

Si esto nos ocurre, debemos tener claro que nuestra seguridad y la de los nuestros es lo único importante, ya que las cosas materiales se pueden reponer, y el seguro nos indemnizará por su pérdida.

Ponernos a salvo

Si podemos, lo mejor será salir de la vivienda y ponernos a salvo en casa de un vecino o yendo a una zona concurrida.

Si no es posible escapar sin toparnos con los ladrones, lo mejor será no hacer ruido y buscar un buen escondite, en una habitación con pestillo o armario con cerradura. Si no hay ninguna estancia así en nuestra vivienda, podemos bloquear la puerta de la habitación con un mueble pesado.

Contactar con la policía

Debemos llevar con nosotros un móvil bien cargado. Al llamar a la policía, comenzaremos indicando la dirección por si tuviéramos que finalizar la llamada antes de tiempo; después, describiremos la situación de la manera más concisa posible.

Debemos recordar poner el móvil en silencio, para que el tomo de nuestro teléfono no descubra nuestra posición a los ladrones.

Prestar atención a lo que podamos ver u oír

Si escuchamos con atención podremos averiguar información, como en qué parte de la casa se encuentran los ladrones o cuántos son. Si logramos ver a los ladrones sin abandonar nuestro lugar seguro, intentaremos recordar todos los detalles posibles que ayuden a la policía a identificarlos.

No enfrentarnos a los ladrones si no es necesario

Nunca iremos en busca del ladrón ni buscaremos confrontación. Si nos encuentra, intentaremos mantener la calma y colaborar con él en lo que nos pida, abriendo la caja fuerte, silenciando la alarma… Algunas alarmas para el hogar tienen la opción de aviso silencioso: al introducir un código concreto, la alarma dejará de sonar, pero enviará un mensaje a la central receptora para comunicar que el propietario desactivó la alarma bajo coacción.

Solo si el ladrón intenta hacernos daño a un miembro de nuestra familia o a nosotros, o quiere cometer un secuestro, debemos intentar defendernos, inhabilitándolo con técnicas de defensa personal o golpeándolo con un objeto contundente. Si logramos reducirlo, escaparemos cuanto antes.

Distintos tipos de delitos contra la propiedad que podemos sufrir en nuestro domicilio

Solemos utilizar la palabra «robo» para hablar de cualquier tipo de sustracción de propiedades, pero existen tres tipos de delitos: robo, hurto y atraco.

Una vez nos hayamos puesto a salvo y hayamos denunciado los hechos a la policía, será importante tener claro cuál de estos delitos hemos sufrido de cara a los procesos legales y a los trámites con el seguro.

Robo en el domicilio

Para que un delito se considere robo, debe producirse fuerza o violencia contra las propiedades, pero no contra las personas. Por ejemplo, cuando un ladrón fuerza la cerradura o rompe una ventana para robar en un domicilio es un robo.

En los robos en domicilios, el seguro de hogar, además de cubrir los objetos robados, otorgará una indemnización por los daños realizados contra las propiedades.

Hurto en el domicilio

El hurto es una sustracción que se produce en un descuido del propietario, en el que el ladrón no necesita usar fuerza sobre las propiedades ni violencia o intimidación a las personas.

Si los ladrones se encontraran la puerta de la vivienda abierta o entraran por una ventana sin necesidad de romperla, el delito cometido sería un hurto.

No todos los seguros de hogar cubren los hurtos, aun cuando se producen dentro del domicilio, además, el importe de la indemnización será más reducido que si se produce un robo o atraco, y las penas por hurto serán menores.

Atraco en el domicilio

El atraco es un delito en el que, para sustraer una propiedad, se ejerce fuerza, violencia, o intimidación a las personas.

Si los ladrones, al entrar en nuestro domicilio, nos encuentran dentro, y nos amenazan para hacerse con nuestras pertenencias, estaremos sufriendo un atraco.

Las penas por atraco son mayores, por las lesiones físicas o secuelas psicológicas que pueden sufrir las víctimas.

Los seguros de hogar siempre cubren los atracos que se producen en domicilios y también suelen indemnizarnos por los atracos cuando estos ocurren fuera de casa.

En Prevent, como expertos en seguridad, recomendamos tomar precauciones para evitar sufrir este tipo de delitos, como cerciorarnos de dejar nuestra casa bien cerrada al salir, y ser discretos en lo relativo a nuestras vacaciones, y, si nos preocupa especialmente la seguridad de nuestro hogar por vivir en una zona conflictiva o tener propiedades muy valiosas en casa, recomendamos instalar sistemas de seguridad profesionales, con una empresa de seguridad homologada.

Fuente: Fotocasa Life