Trabajo en Internet: ¡cuidado con las estafas!

Si eres un usuario frecuente de las redes sociales, es probable que hayas visto anuncios que ofrecen oportunidades de ganar dinero rápido realizando trabajos por Internet. Estas ofertas abarcan desde completar encuestas online hasta adquirir productos para revender, invertir en empresas o participar en sorteos. Algunas de estas propuestas, incluso las respaldadas por conocidos influencers, resultan ser fraudulentas. Mediante promesas de tareas sencillas y remuneradas que nunca llegan a concretarse, los ciberdelincuentes logran obtener información confidencial, que incluye contraseñas, números de tarjetas de crédito y datos bancarios, utilizando una técnica conocida como phishing. Esta estrategia es una creciente preocupación en el ámbito de la ciberseguridad. Por eso la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI) advierte de este tipo de estafas y ofrece consejos prácticos para prevenirlas y poder actuar si se ha caído en alguna de ellas.

Ganar dinero rápido online

En las redes sociales es cada vez más frecuente encontrarse con anuncios y vídeos protagonizados por usuarios, algunos reconocidos influencers, que dan soluciones aparentemente sencillas y rápidas para aumentar los ingresos. A través de la realización de tareas en línea, ofrecen recompensas económicas. Estos trabajos incluyen actividades como ver anuncios, completar encuestas, registrarse en sitios web, descargar aplicaciones e incluso participar en juegos en línea

Según denuncia el Instituto Nacional de Ciberseguridad de España (INCIBE) a través de la Oficina de Seguridad del Internauta, en muchas ocasiones detrás de estas propuestas se esconden ciberdelincuentes. En algunos casos, estos estafadores suplantan la identidad de individuos o empresas legítimas, mientras que en otros intentan atraer a los usuarios con ofertas atractivas y engañosas.

En ambos escenarios, su objetivo principal es engañar a las víctimas, recopilar información y, con frecuencia, realizar un uso fraudulento de esos datos sensibles. Esta táctica es conocida como phishing. Por supuesto, nunca cumplen con la promesa de pagar por los supuestos trabajos encargados.

¿Qué trabajos ofrecen los ciberdelincuentes?

Entre las tareas que los ciberdelincuentes proponen para atraer a sus víctimas, están las siguientes:

Ver anuncios o hacer clic en enlaces. A los participantes se les asegura una compensación por ver contenidos audiovisuales o acceder a enlaces específicos.
Rellenar encuestas. Con frecuencia, los estafadores solicitan información personal, incluso datos bancarios. En otras ocasiones, las respuestas obtenidas en las encuestas se emplean con fines de investigación de mercado, lo que puede poner en riesgo la privacidad y seguridad de tus datos.
Describir el contenido de una imagen. En esta estafa, te envían una imagen y te solicitan que describas los caracteres y dígitos que visualizas en ella.
Completar tareas. Son muy variopintas. Abarcan desde registrarse en un sitio web o descargar una aplicación para completar desafíos o misiones dentro de la plataforma.
Jugar en línea. Aunque puede parecer tentador, esta estrategia es utilizada por estafadores para atraer a jugadores y obtener información personal o dinero.
Comprar productos. Los ciberdelincuentes afirman que, al adquirir ciertos productos, se lograrán significativas ganancias al revenderlos.
Transferir dinero. Los estafadores solicitan a las personas que transfieran dinero a cambio de promesas de recompensas o beneficios financieros.

Un caso real de estafa de ciberdelincuentes

Para ilustrar la gravedad de estas estafas y la importancia de actuar con cautela, la Oficina de Seguridad del Internauta presenta un caso real:

Mientras exploraba las publicaciones de sus amigos en una red social, un usuario se encontró con un vídeo que despertó su curiosidad. En él, un individuo prometía una forma rápida y sencilla de ganar dinero en línea. Todo lo que se requería era llevar a cabo algunas tareas simples y, a cambio, se le garantizaba un generoso pago. Estas tareas incluían desde ver anuncios hasta completar encuestas o probar aplicaciones.

Al hacer clic en el enlace del vídeo fue redirigido a un sitio web donde se le solicitaban sus datos personales. Tras registrarse, recibió un correo electrónico con instrucciones para realizar trabajos. Invirtió horas y días de su tiempo en estas tareas, pero la prometida recompensa nunca llegó. Enfadado, decidió iniciar una investigación sobre el sitio web y descubrió que muchas personas como él habían caído en la misma trampa.

¿Qué se puede hacer para evitar estas situaciones?

La OSI da estos consejos para evitar caer en estas estafas:

Sé escéptico. Como bien dice el refrán, “nadie da duros a cuatro pesetas”. En otras palabras, ten precaución si un anuncio o vídeo promete ganancias fáciles y rápidas.
Lee los términos y condiciones. Aunque pueda parecer tedioso, es esencial revisar la letra pequeña. Presta atención a cómo se gestionan tus datos personales, los métodos de pago y cualquier cargo oculto o condiciones engañosas.
Investiga. Busca información sobre la empresa, recopila opiniones de otras personas que hayan trabajado con ella. Seguramente no serás el primero o el último en caer en las redes de los estafadores.
Verifica la legitimidad de la plataforma. Indaga sobre el historial y la reputación de la empresa antes de comprometerte. Asegúrate de que esté debidamente registrada y la información de contacto es clara y accesible.
Utiliza fuentes confiables. Ganar dinero a través de Internet es posible, pero dar con la oferta adecuada requiere dedicar tiempo y esfuerzo. Consulta sitios web o aplicaciones reconocidas.
No compartas información personal. Nunca des datos sensibles, como tu número de Seguridad Social, información bancaria o contraseñas de sitios web.

¿Y si ya he caído en la trampa?

Caer en las redes de los ciberdelincuentes puede ser más fácil de lo que imaginas. Si es el caso, en la OSI también tienen consejos:

Detén cualquier pago adicional. Contacta con tu banco y notifica la situación para bloquear cualquier transacción.
Recopila toda la información relevante sobre la estafa. Detalles como el nombre de la empresa, personas involucradas, fechas, transacciones y capturas de pantalla son importantes. Presenta una denuncia ante las autoridades competentes.
Cambia tus contraseñas. Si has compartido tus claves, cámbialas de manera inmediata. Asegúrate de que las nuevas contraseñas sean sólidas y diferentes.
Realiza una búsqueda en Internet (egosurfing). Investiga en línea para encontrar información personal o privada que pueda haber sido publicada sobre ti. Solicita su eliminación al servicio donde esté alojada y, si es necesario, ejerce tu derecho al olvido para borrar esa información de manera permanente.