Las posibilidades de mejorar y reformar una vivienda son prácticamente ilimitadas.

Por eso, a la hora tomar la decisión y dar el paso, la duda acecha: ¿necesito permiso?, ¿no lo necesito? Y, como lo que menos apetece cuando uno se dispone a darle una nueva imagen a su casa o a hacerla más confortable, es acabar con la propiedad precintada y con una sanción, te explicamos qué obras no requieren licencia. Entérate de si tienes que realizar algún trámite antes de emprender las reformas.

Obras sin licencia en viviendas

Las actuaciones que uno puede realizar en su vivienda sin trámite alguno con la administración son muy pocas. Y es que, no tener que pedir licencia de obras no es sinónimo de no tener que informar al Ayuntamiento correspondiente de que se van a desarrollar ciertos trabajos.

Esta información se realiza mediante lo que se conoce como comunicación previa de obras menores a las que, en ciudades como en Mérida, se refieren incluso como obras inocuas. El calificativo da una idea del calado de los trabajos que se pueden desarrollar bajo este tipo de trámite.

Comunicación previa obras menores

Las pequeñas reformas requieren de comunicación previa a la administración. Esto es sí en multitud de ciudades, desde Madrid a Zaragoza, pasando por Mérida, Bilbao o Vigo. Este trámite, que generalmente se puede realizar online, exige rellenar un formulario. Y que se aporte documentación adicional. Como por ejemplo una memoria de actuación, un plano y el presupuesto. También hay que pagar las tasas.

Pero, ¿qué reformas o mejoras están sujetas a una comunicación previa? Pues bastantes, aunque la última palabra la tendrá el ayuntamiento de la ciudad donde residas. Sin embargo, entre las mejoras que por lo general deben cumplir este trámite, figuran los cambios de ventanas. Así como de barandillas o persianas. También la instalación de fontanería, electricidad o calefacción, entre otras.

Ahora, lo que una ciudad entiende como objeto de comunicación previa, no tiene porque replicarse en otra. Varios ejemplos lo ilustrarán mejor. Así, mientras en Zaragoza la pintura del hogar requiere de este trámite, en Madrid el ayuntamiento especifica que pintar no tendrá que someterse a este procedimiento. Esto significa que ahí sí podrá realizarse sin pedir permiso alguno. E incluso sin comunicarlo.

Reformas sin licencia y sin comunicación

Siguiendo con el ejemplo de Madrid, la ordenanza municipal exime de comunicación previa y de licencia otros trabajos. Como soldados, alicatados, enyesados o, también, la sustitución de instalaciones propias. Aspecto, este último en el que difieren otras capitales como Vigo, donde la sustitución de instalaciones privativas de agua, luz o electricidad está sometida a comunicación previa.

Frente a estas divergencias, hay aspectos en los que suelen coincidir la mayoría de las capitales. Y que alteran este esquema. Por ejemplo, si alguna de las actuaciones mencionadas se va a ejecutar en edificios con algún tipo de protección. O si, por cualquier razón, pueden suponer una alternación de la estructura, entonces la cosa cambia y será necesaria licencia.

Como ves, este es un tema que entraña cierta complejidad, en especial por las divergencias que existen entre ciudades. Por ello, antes de dar cualquier paso, lo ideal es aclarar cualquier duda en tu ayuntamiento o consultar a un profesional que, además, te asesorará sobre la solución más adecuada para reformar tu vivienda. Y para hacerlo de acuerdo con la normativa.

Artículo publicado en Fotocasa por Certicalia