Las minicasas urgieron en Japón en la década de los noventa. Ahora comienzan a popularizarse en nuestro país.
Nacieron como respuesta a los altos precios de las viviendas, impulsadas en Estados Unidos durante la crisis inmobiliaria. En 2010 se trasladaron a Europa a través de Reino Unido y Francia, Ahora las minicasas empiezan a llegar a España.
Por qué se han popularizado las minicasas en España
Este tipo de vivienda se caracteriza por tener una superficie menor a los 40 metros cuadrados. Su coste oscila entre los 22.000 y los 40.000 euros. Y su principal uso es para una segunda vivienda. También puede servir para ampliar la vivienda y que tenga una mayor superficie. O como anexo a la casa principal, como oficina o cuarto de invitados.
La demanda de este tipo de viviendas ha aumentado en nuestro país. Y esto ha sido así gracias a la filosofía de lo minimalista y a su coste. Con un coste medio de 1.000 euros por metro cuadrado, las minicasas se han convertido en una alternativa real para muchas personas de poder conseguir una segunda residencia sin necesidad de una hipoteca.
Sino con un préstamo personal sin necesidad de presentar un aval o una garantía. Y con unos costes de formalización mucho menores a los de un préstamo hipotecario.
¿Comprar una minicasa me convierte en propietario?
Dependerá de la categorización de dicha vivienda. En España, al ser una moda relativamente nueva y en auge, no existe una legislación específica. Por lo que las leyes que lo regulan dependerán del tratamiento que le demos a dicha casa. Comprar una minicasa podría o no convertirte en propietario, según se catalogue el bien como mueble o inmueble.
Si la minicasa está anclada al suelo, con abastecimiento de agua pública y toma de luz, entonces se considerará un bien inmueble. Y su compra nos convertirá en propietarios de una vivienda. En este caso tendremos que contar con una licencia de construcción y ubicación, así como permiso de obras. También será necesario cumplir los requisitos de la Ley de Ordenación de Edificios y el Código Técnico de Edificación.
Otro aspecto a tener en cuenta, si queremos registrarla como un bien inmueble, es el tamaño de dicha casa. Según el ayuntamiento existe un tamaño mínimo para que se considere vivienda. Y en caso de no cumplir con las medidas mínimas, no nos darán los permisos que necesitamos.
En el caso de que esta vivienda no esté anclada al suelo y se autoabastezca (como es el caso de una gran cantidad de estas minicasas) se considerará un bien mueble. Esto nos permitirá obtenerlas sin tantos trámites, pero no nos hará propietarios. En este caso la minicasa solo necesitará la licencia de la ubicación.
Artículo publicado en: Fotocasa.es