La certificación energética G es la más baja e identifica a los edificios menos eficientes. ¿Por qué se obtiene una mala calificación energética y qué consecuencias tiene en nuestra factura de gas y luz?
Más de 173.000 inmuebles con certificación energética G en España
La eficiencia energética de un inmueble se mide en una escala que va de la A, etiqueta para los edificios más eficientes, a la G, que etiqueta a los edificios con menos eficiencia energética de nuestros país. El 28% de los inmuebles en España obtienen una certificación energética G, la peor calificación energética de la escala de la etiqueta energética. En total, ya son 173.000 las viviendas y locales con calificación energética G según el informe del estado de la certificación energética del Ministerio de Industria. Según este mismo informe, la comunidad autónoma con más calificaciones energéticas G registradas hasta ahora es Canarias, con un 74% ce inmuebles que han obtenido esta mala calificación energética.
Qué ocurre si mi casa obtiene una certificación energética G
Si al realizar el certificado energético de su inmueble obtiene la peor calificación energética, la G, no tiene la obligación de realizar ningún tipo de reforma o mejora. La normativa le obliga a mostrar calificación energética de su inmueble, en esta caso la G, en todos los anuncios y ofertas que haga para vender su inmueble. No hay una calificación energética mínima estipulada por la normativa. Obtengan la calificación energética que obtengan los inmuebles la obligación es la de mostrar el resultado del certificado energético en los anuncios de venta o alquiler.
Las viviendas y locales con certificación energética G son los que más dinero gastan en energía.
Según los datos recogidos por el Ecobservatorio de Certicalia, el gasto medio anual de un inmueble con calificación energética G es de 2.087 euros en calefacción, agua caliente y aire acondicionado. Para un inquilino o comprador que esté buscando piso es un dato a tener muy en cuenta. La media de los inmuebles españoles gastan 1010 euros anuales en energía. Los inmuebles que en el certificado energético han obtenido una G gastan el doble. Es por eso que las viviendas y locales que obtiene una calificación energética g son los menos deseables en términos de gasto, ya que las facturas en calefacción y agua caliente serán el doble que la media.
Cómo mejorar una calificación energética G
El certificado energético incluye una serie de mejoras para aumentar la calificación energética de la vivienda. Son consejos que, de llevarse a cabo, pueden reducir considerablemente el gasto energético del inmueble. Las medidas de mejora que más se recomiendan para mejorara una certficación energética G son: . Cambio de ventanas. La calidad de vidrios y carpinterías ha mejorado muchísimo en los últimos años. Sustituir unas ventanas con vidrio simple por otras con doble capa de vidrio y rotura de puente térmico es una medida muy efectiva para mejorar la eficiencia energética de un inmueble. . Cambios de instalaciones de agua caliente. Hay viviendas que conservan calderas muy antiguas y son muy poco eficientes. Es decir, consumen mucha energía para calentar unos litros de agua. En cambio, los sistemas más recientes, como la calderas de condensación, son mucho más eficientes y consumen menos energía para calentar el agua que la vivienda necesita.
¡Recuerda! Si vas a alquilar o comprar una casa, tienes derecho a conocer la calificación energética que ha obtenido en su certificado energético.
Artículo publicado por: Certicalia.com